Crítica del libro Más allá de una escuela peronista

María Iris Vil­la­gra*

Recibido: 3 de noviem­bre de 2018
Acep­ta­do: 29 de diciem­bre de 2018

En las últi­mas décadas los estu­dios sobre el per­o­nis­mo han tenido un gran crec­imien­to. Las políti­cas públi­cas, el par­tido per­o­nista y el sindi­cal­is­mo han sido obje­to de impor­tantes inves­ti­ga­ciones. Asimis­mo son numerosos los esta­dos de la cuestión que se pro­po­nen orga­ni­zar esa pro­duc­ción. En este mar­co, Más allá de una escuela per­o­nista. Políti­cas públi­cas y edu­cación en la provin­cia de Buenos Aires (1946–1955) bus­ca pro­fun­dizar sobre las políti­cas educa­ti­vas durante ese peri­o­do.

La auto­ra sostiene que la políti­ca educa­ti­va del per­o­nis­mo con­sti­tuyó el pris­ma a través del cual las Cien­cias Sociales pre­tendieron mirar el carác­ter ver­ti­cal­ista y autori­tario del Esta­do durante esos años. El propósi­to de este libro, a par­tir del análi­sis de un impor­tan­tísi­mo cau­dal de fuentes, es demostrar que la edu­cación esco­lar de este perío­do fue una bis­agra en la his­to­ria de la edu­cación argenti­na ya que pro­du­jo cam­bios en su con­fig­u­ración a par­tir de una may­or val­orización de la edu­cación.

El libro comien­za con una intro­duc­ción en donde la auto­ra enmar­ca el obje­ti­vo en las dis­cu­siones his­to­ri­ográ­fi­cas que atraviesan las políti­cas públi­cas y la edu­cación durante el primer per­o­nis­mo. El primer capí­tu­lo estu­dia los antecedentes de la políti­ca educa­ti­va del per­o­nis­mo en la provin­cia de Buenos Aires. Los tres sigu­ientes anal­izan las políti­cas educa­ti­vas del gob­ier­no per­o­nista y sus alcances, pro­fun­dizan­do en el apara­to insti­tu­cional, los fun­cionar­ios y diri­gentes; el pre­supuesto educa­ti­vo y la obra públi­ca; y, final­mente avan­za en el estu­dio de los posi­bles resul­ta­dos de esas políti­cas. Los tres últi­mos capí­tu­los ponen en con­sid­eración el gob­ier­no local de la edu­cación, la refor­ma de los con­tenidos y tex­tos esco­lares y la for­ma­ción y par­tic­i­pación gremi­al de los docentes.

Se pro­pone ir más allá de aque­l­las per­spec­ti­vas que cen­tran el análi­sis de la his­to­ria de la edu­cación durante el per­o­nis­mo en las her­ramien­tas de adoc­tri­namien­to y “per­onización” de la edu­cación y car­ac­ter­i­zan las prác­ti­cas estatales como ver­ti­cal­is­tas, cen­tral­is­tas e inclu­so autori­tarias. Sin descono­cer la exis­ten­cia de dichas prác­ti­cas la auto­ra corre el eje del estu­dio. Con un mar­ca­do enfoque region­al, pone la mira­da sobre la políti­ca educa­ti­va que imple­men­tó el per­o­nis­mo en la provin­cia de Buenos Aires. Para demostrar que los alcances de esas políti­cas super­aron en el tiem­po al proyec­to políti­co que los impul­só, la auto­ra se sus­ten­ta en un rig­uroso análi­sis de vari­adas y numerosas fuentes. A par­tir de este estu­dio logra desen­trañar las políti­cas educa­ti­vas de la edu­cación pri­maria y los actores involu­cra­dos en su dis­eño e imple­mentación, para dar cuen­ta de los aspec­tos inno­vadores y visu­alizar su aporte en el estu­dio del Esta­do argenti­no.

En el recor­ri­do de la obra encon­tramos un análi­sis de las políti­cas educa­ti­vas que se imple­men­taron en la primera mitad del siglo XX, tenien­do en cuen­ta las prin­ci­pales pre­ocu­pa­ciones de los diri­gentes, sus pos­turas en cues­tiones como el anal­fa­betismo, el rol docente y las famil­ias. Desen­traña la labor del Con­se­jo Gen­er­al de Edu­cación, de la Direc­ción Gen­er­al de Escue­las y de los Con­se­jos Esco­lares a través del estu­dio de las prin­ci­pales nor­ma­ti­vas para las escue­las pri­marias durante sus primeros seten­ta años de exis­ten­cia. Así mues­tra la situación en la que se encon­tra­ba la edu­cación cuan­do asume la gob­er­nación de la provin­cia de Buenos Aires en 1946 Domin­go Mer­cante: el esce­nario nor­ma­ti­vo, el gra­do de desar­rol­lo de la esco­lar­ización tan­to en los cen­tros urbanos como en los ámbitos rurales, la visión de los fun­cionar­ios y los espe­cial­is­tas en edu­cación ele­men­tal y las posi­ciones de los diri­gentes políti­cos del nue­vo gob­ier­no frente al esce­nario que se les pre­senta­ba.

Aden­trán­dose en el peri­o­do bajo estu­dio anal­iza en qué medi­da la tradi­cional estruc­tura de la Direc­ción Gen­er­al de Escue­las y del Con­se­jo de Edu­cación se vio mod­i­fi­ca­da con la creación del Min­is­te­rio de Edu­cación de la provin­cia de Buenos Aires en 1949. Este pro­ce­so implicó para la edu­cación una may­or cen­tral­ización y con­trol de las deci­siones que se imple­men­tó a par­tir de las refor­mas ya real­izadas en la Direc­ción Gen­er­al de Escue­las. Según la auto­ra “una serie de medi­das procu­raron la difer­en­ciación y espe­cial­ización de las fun­ciones de la repar­ti­ción y fueron dan­do lugar a una estruc­tura que en 1949 era mucho más com­ple­ja y diver­si­fi­ca­da que aque­l­la hereda­da por el gob­ier­no de Domin­go Mer­cante tres años atrás” [Petit­ti 2017: 58].

Esta nue­va reor­ga­ni­zación atendió prob­le­mas que impedían la ampliación de la matrícu­la, la escasez y el des­cuida­do esta­do de los edi­fi­cios esco­lares y la desigual­dad dis­trib­u­ti­va de los puestos de los mae­stros. Por otra parte, señala que los prin­ci­pales logros alcan­za­dos como resul­ta­do de las políti­cas educa­ti­vas fueron la exten­sión de la influ­en­cia del gob­ier­no de la edu­cación superan­do los már­genes de la edu­cación pri­maria, a través de avances en las áreas de edu­cación preesco­lar, post esco­lar espe­cial­iza­da, la psi­cología edu­ca­cional y ori­entación pro­fe­sion­al. Asimis­mo, señala la impor­tan­cia del área de cul­tura que puso a la escuela como difu­so­ra cul­tur­al y a la cul­tura como estrate­gia de inter­ven­ción en el aula.

En tér­mi­nos gen­erales, en lo que respec­ta a los recur­sos esco­lares el libro mues­tra que hubo un cam­bio impor­tante en su com­posi­ción. Sin embar­go, la pér­di­da de recur­sos pro­pios, no sig­nificó la dis­min­u­ción del pre­supuesto educa­ti­vo. Por el con­trario, la finan­ciación a car­go de rentas gen­erales del gob­ier­no provin­cial pro­por­cionó un incre­men­to pre­supues­tario durante los años 1949 y 1950, los dos años sigu­ientes se man­tu­vo para luego dupli­carse en 1953 y con­tin­uar cre­cien­do en menor medi­da los años pos­te­ri­ores. Los cam­bios sobre la com­posi­ción y admin­is­tración de los recur­sos des­ti­na­dos a la edu­cación, que se men­cio­nan detal­lada­mente en la obra, revirtieron la situación edili­cia de las escue­las del Esta­do con edi­fi­cio pro­pio, que lle­garon a ser 2.212 en 1956 frente a las 833 que había diez años antes. Las edi­fi­ca­ciones esco­lares estu­vieron a car­go del Min­is­te­rio de Edu­cación y no del Min­is­te­rio de Obras públi­cas, posi­bil­i­tan­do una may­or par­tic­i­pación del primero en las plan­i­fi­ca­ciones.

La creación de escue­las, nuevos puestos para mae­stros y la incor­po­ración de no solo más sino nuevos actores, fueron parte de un pro­ce­so de esco­lar­ización que se dio a lo largo del perío­do. El aumen­to de la matrícu­la esco­lar no se debió solo al crec­imien­to veg­e­ta­ti­vo y la inmi­gración, sino tam­bién a la incor­po­ración de quienes no forma­ban has­ta entonces parte del sis­tema educa­ti­vo, como niños en edad preesco­lar, que ter­mina­ban la escuela pri­maria o que requerían edu­cación espe­cial debido a enfer­medades físi­cas o trastornos psíquicos. Tam­bién cre­ció notable­mente el acce­so a la edu­cación bási­ca en los sec­tores rurales.

La nue­va estruc­tura con­for­ma­da a par­tir del Min­is­te­rio de Edu­cación sig­nificó una trans­for­ma­ción en los canales de par­tic­i­pación de la sociedad en mate­ria educa­ti­va. Según se demues­tra no implicó una dis­min­u­ción en la mis­ma sino un desplaza­mien­to a las coop­er­ado­ras esco­lares y otras aso­cia­ciones como sociedades de fomen­to. Por esta razón, se afir­ma que el reem­pla­zo de los Con­se­jos Esco­lares más que un avance del Esta­do sobre la sociedad, implicó una democ­ra­ti­zación en la for­ma de inter­ven­ción.

Por otra parte, Más allá de una escuela per­o­nista pre­tende mostrar que los libros esco­lares y los nuevos planes de estu­dio, den­tro de los cuales la políti­ca y la gestión de gob­ier­no pasaron a for­mar parte de los dis­cur­sos esco­lares, fueron solo un aspec­to, tal vez el más estu­di­a­do por la his­to­ri­ografía sobre la políti­ca educa­ti­va del per­o­nis­mo. Evi­den­cia de ello es que en 1949 fue reem­plaza­do el cuer­po de inspec­tores encar­ga­dos de definir los con­tenidos por cin­co asesores del recien­te­mente crea­do depar­ta­men­to de didác­ti­ca, que elab­o­raron los planes de estu­dios y selec­cionaron los tex­tos esco­lares. Por otra parte enfa­ti­za en la san­ción de la Ley de Edu­cación de 1951, que no fue dero­ga­da y con­tin­uó en vigen­cia has­ta 1995, con muy pocas mod­i­fi­ca­ciones.

Otro ele­men­to cen­tral que abor­da la auto­ra es que se lle­varon a cabo mod­i­fi­ca­ciones en mate­ria de la for­ma­ción docente. Los exámenes de ingre­so fueron mas exi­gentes, se incre­men­taron los años de la car­rera y se refor­maron los planes de estu­dio. A su vez, se comen­zaron a dic­tar espe­cial­iza­ciones en ped­a­gogía y didác­ti­ca, para docentes de edu­cación ini­cial y para docentes de alum­nos con enfer­medades físi­cas o psíquicas. Tam­bién sostiene que a par­tir de las rela­ciones de los mae­stros con el gob­ier­no, se lograron nuevos ben­efi­cios salar­i­ales, con­cur­sos por oposi­ción y reconocimien­to para los mae­stros rurales. De esta for­ma, com­ple­jiza la mira­da en torno a las agru­pa­ciones docentes, ya que plantea que hubo con­flic­tos y nego­cia­ciones, pro­duc­to de las difer­entes y cam­biantes pos­turas frentes a las políti­cas del gob­ier­no.

En suma, la orig­i­nal­i­dad de la obra está dada des­de dis­tin­tas aris­tas, la primera es el abor­da­je de la políti­ca educa­ti­va del per­o­nis­mo a par­tir de la propia políti­ca  inter­na: su lugar en pre­supuestos, el des­ti­no de las par­tidas, los planes educa­tivos, la creación del Min­is­te­rio, entre otras. Una segun­da, es el análi­sis de los difer­entes actores des­de los min­istros has­ta los inte­grantes de la comu­nidad educa­ti­va. Por últi­mo, el análi­sis abor­da la vin­cu­lación de la sociedad civ­il con la escuela y los alum­nos. El com­ple­jo análi­sis que desar­rol­la, no solo con­sti­tuye una lec­tura impre­scindible para aque­l­los intere­sa­dos en pro­fun­dizar sobre la edu­cación durante el per­o­nis­mo, sino tam­bién para quienes se encuen­tran incli­na­dos a reflex­ionar sobre el Esta­do, el impacto de la políti­ca educa­ti­va en la sociedad y el dis­cur­so his­to­ri­ográ­fi­co.

***

Petit­ti, Eva Mara 2017. Más allá de una escuela per­o­nista. Políti­cas públi­cas y edu­cación en la provin­cia de Buenos Aires (1946–1955). Pro­his­to­ria Edi­ciones, Rosario. 266 p. ISBN 978–987-3864–75‑9

* Pro­fe­so­ra de His­to­ria y estu­di­ante de la Licen­ciatu­ra en His­to­ria. Uni­ver­si­dad Autóno­ma de Entre Ríos.

~•~

  Cómo citar ¬

Villagra, «Crítica del libro Más allá de una escuela peronista», Revista de Estudios Marítimos y Sociales [En línea], publicado el [insert_php] echo get_the_time('j \d\e\ F \d\e\ Y');[/insert_php], consultado el [insert_php] setlocale(LC_ALL,"es_ES"); echo strftime("%e de %B del %Y");[/insert_php]. URL: https://estudiosmaritimossociales.org/archivo/rems-14/resena-villagra/
~•~
Licencia de Creative Commons
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento — No Comercial — Compartir Igual 4.0 Internacional.